Dedicado a Javier, Nacho y Fernando.
Hace muchos años yo caminaba por la Plaza de Moscú de Budapest, un día de agosto con calor sofocante. De pronto el cielo se cubrió Sigue leyendo
Dedicado a Javier, Nacho y Fernando.
Hace muchos años yo caminaba por la Plaza de Moscú de Budapest, un día de agosto con calor sofocante. De pronto el cielo se cubrió Sigue leyendo