Tras pedir cita de manera rigurosa en la entidad bancaria en la que necesito realizar una gestión, acudo el día y hora convenidos. Hace ya mucho tiempo que no entraba. Han cambiado el escenario, no la luz ambiental ni los colores. Tampoco los carteles de ofrecer y ofrecer para ganar y ganar. Ya no hay caja y se han reducido los empleados.
Sigue leyendo